Círculos concéntricos

El Agua, Caída, Líquido, Bienvenida

 

De toda la vida toma café en la misma taza. Le gusta removerlo, mirar el remolino. Disfruta escuchando cómo centrifuga la lavadora. Suele dibujar ristras de redondeles con una obstinación enfermiza. Estas repeticiones infinitas de series circulares le producen una serenidad sencilla pero placentera. Como el runrún que siente un bebé pegado al pecho de la madre. Aunque él no conoció a la suya. Cosas que pasaron.

Hoy garabatea compulsivamente en el periódico sobre una noticia que dice que encontraron unos huesos de la guerra. De mujer. Dicen que también había un sonajero antiguo. Viene la foto. Es bonito. Un aro rojo. Brillante, redondo.